Entre las tecnologías que han pasado a formar parte integral de nuestra vida cotidiana, la biometría de voz destaca por haber transformado la forma en la que interactuamos con nuestros dispositivos. La biometría vocal, también conocida como tecnología de reconocimiento de voz, utiliza características vocales únicas para identificar a las personas y ha abierto nuevas puertas para diversas aplicaciones aportando además grandes beneficios. Pero también puede ser fuente de frustración y discriminación para las personas cuya identidad de género, expresión de género o comportamiento no se ajusta a lo que suele asociarse con el sexo que se les asignó al nacer. En este sentido, una comunidad que ha tenido sus más y sus menos con sus avances es la comunidad transexual.
¿Cuáles son los pros, los contras y las repercusiones de la biometría vocal para las personas transexuales y con diversidad de género?
Afrontar los retos de la comunidad transexual
Aunque la biometría de voz ha demostrado ser una potente herramienta para garantizar la seguridad y la privacidad, su aplicación también ha planteado retos para la comunidad transexual, entre los que destacan la necesidad de inclusión y comprensión.
Desajuste entre voz e identidad
Las personas transgénero y de género diverso suelen recibir tratamientos que puede incluir terapia hormonal, terapia vocal o cirugía vocal para ayudarles a alinearse con su identidad de género. Sin embargo, los sistemas biométricos de voz pueden seguir utilizando sus patrones de voz anteriores a la transición, lo que provoca una falta de correspondencia entre su voz y su identidad. Esta falta de correspondencia puede dar lugar a su exclusión del acceso a servicios esenciales o a que se enfrenten a sospechas y posibles malos tratos.
La experiencia transgénero con disforia de voz
Uno de los pasos más importantes para muchas personas transexuales es la transición, que puede implicar intervenciones médicas como la terapia hormonal o cirugías de reafirmación de género. Un obstáculo difícil durante y después de este proceso puede ser la disforia vocal, que se refiere a la incomodidad o ansiedad que se experimenta cuando la voz de una persona no coincide con su identidad de género. Esta disonancia puede afectar a su bienestar general y obstaculizar su capacidad para expresarse con autenticidad.
Falta de representación en los conjuntos de datos
Los sistemas biométricos de voz se basan en amplios conjuntos de datos para establecer una base de comparación e identificación. Desafortunadamente, las voces transgénero suelen estar infrarrepresentadas o no se incluyen en absoluto en estos conjuntos de datos. Esta exclusión puede dar lugar a algoritmos sesgados y resultados inexactos en la autenticación de personas transgénero, perpetuando todavía más la posible discriminación.
Preocupación por la privacidad y la divulgación
Exigir a las personas transgénero y de género diverso que revelen su condición de transgénero o que aporten documentación adicional para autenticar su voz puede suponer una violación de la privacidad y provocar ansiedad. Es fundamental que los sistemas biométricos de voz respeten el derecho a la intimidad de las personas y, al mismo tiempo, garanticen procesos de autenticación precisos e inclusivos.
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La biometría vocal como catalizador de la inclusión
Afortunadamente, esta tecnología de voz, en rápida evolución, se ha convertido en una potente herramienta para abordar los retos a los que se enfrentan las personas transexuales, sobre todo en relación con la disforia vocal. Al analizar las características vocales únicas de una persona, los sistemas de reconocimiento de voz pueden reconocer a los individuos en función de sus patrones de voz, independientemente de su identidad de género o presentación.
La biometría vocal no sólo ofrece una solución práctica para las personas transexuales en diversos aspectos de la vida, sino que también les permite desenvolverse en sus interacciones cotidianas con más confianza y autenticidad. He aquí algunas áreas en las que la biometría de voz ha tenido un impacto positivo.
Dispositivos personales y asistentes inteligentes
Los dispositivos personales activados por voz y los asistentes inteligentes, como teléfonos, altavoces o asistentes virtuales, ofrecen ahora funciones de reconocimiento de voz inclusivas que han evolucionado para tener en cuenta los patrones de voz únicos, la cadencia, el ritmo, la inflexión, la entonación y los acentos. Esto significa que las personas transgénero pueden acceder y controlar estos dispositivos sin esfuerzo, sin preocuparse de que su voz desencadene disforia o sea malinterpretada.
Autenticación y banca por voz
La biometría vocal también ha revolucionado el campo de la banca y la autenticación por voz. Las personas transexuales pueden acceder de forma segura a sus cuentas, realizar transacciones y autenticar sus identidades utilizando sistemas de reconocimiento de voz diseñados para ser inclusivos y adaptables.
Comunicación profesional
En el mundo profesional, la disforia vocal puede suponer un obstáculo para los transexuales a la hora de realizar entrevistas telefónicas, conferencias o presentaciones en público. La biometría vocal ofrece una solución potencial, ya que las empresas están explorando formas de incorporar sistemas de reconocimiento de voz inclusivos que respeten y validen la identidad de género de las personas.
Fomentar la inclusión y afrontar los retos
Para mitigar los retos a los que se enfrenta la comunidad transexual, los sistemas biométricos de voz deben incluir diversas muestras de voz en sus conjuntos de datos de entrenamiento y aprendizaje automático. Colaborar con grupos y organizaciones de defensa de la comunidad transexual puede ayudar a garantizar su representación y reducir los sesgos en estos sistemas. Los desarrolladores también deben trabajar para crear algoritmos adaptables que puedan tener en cuenta las variaciones en los patrones de voz debidas a factores como la transición de género o la terapia hormonal. Estos algoritmos deben estar diseñados para adaptarse a las características únicas de la voz de un individuo a lo largo del tiempo, lo que permite una autenticación precisa e inclusiva.
Las empresas también son responsables de tomar medidas proactivas para ser inclusivas si están implantando sistemas biométricos de voz, aumentando la inversión en formación de sensibilidad para su personal con el fin de fomentar un entorno más inclusivo y comprensivo. Educar a los empleados sobre los retos a los que se enfrentan las personas transgénero y hacer hincapié en la importancia de un trato respetuoso es crucial para crear una experiencia inclusiva para todos los usuarios.
La biometría de voz es prometedora para la autenticación segura y, al reconocer las características vocales únicas de las personas, permite a las personas transgénero y con diversidad de género comunicarse con autenticidad y confianza, sin comprometer su identidad. Mientras celebramos los avances de la biometría vocal, es vital abordar los retos a los que se enfrenta la comunidad transexual en su aplicación. Mediante la incorporación de diversos conjuntos de datos, el desarrollo de algoritmos adaptables y la promoción de la formación en sensibilidad, podemos crear sistemas biométricos de voz que sean inclusivos, respetuosos y precisos para todas las personas.
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